La acusación del fiscal se dirige contra el que denomina “clan de los peludos” y que según su relato se integra por las siguientes personas
- Trinidad Santiago Porras – Madre del Clan
- José Ortega Santiago- Mi defendido
- Juan Ortega Santiago- Hermano
- Luis Ortega Santiago- Hermano
- Manuel Ortega Santiago- Hermano
- Miguel Ángel Martínez de la Rosa- Cuñado
- Josefa Carmona Ortega- Esposa mi defendido
- Adoración Rosa Fernández- Cuñada
La acusación del fiscal se basa en los hechos que a continuación os resumo:
Que el “Clan de la Paca” debía al “Clan de los Peludos” la cantidad de doce mil euros por una venta de droga, que a pesar de haberla reclamado en diversas ocasiones no habían cobrado.
Sobre las 22 h de la noche del día 7 de septiembre de 2.009 los acusados se dirigieron en tres coches al poblado de Son Banya portando armas blancas y armas de fuego, dirigiéndose a la vivienda donde estaba Josefa Moreno Cortés (La Parrala) junto con su hermana Consuelo (La Heavy) y su prima Carmen Ligero.
Josefa Moreno era la responsable de los asuntos de la familia ya que la Jefa del Clan, Francisca Cortés Picazo, alias La Paca estaba cumpliendo condena por delitos de narcotráfico y blanqueo de capitales.
En un primer momento las acusadas Trinidad, Josefa y Adoración se dirigen a hablar con la Parrala para tratar de resolver el asunto entre mujeres según las costumbres gitanas, si bien la discusión fue subiendo de tono hasta que intervienen los hijos de Trinidad, en concreto José Ortega Santiago, alias “El Farru”, quien le dice a la Parrala: “PARRALA, A TI TE VOY A MATAR ESTA NOCHE Y A TI TAMBIÉN” lejos de asustarse, La Parrala se enfrentó a José diciéndole “¿A MI ME VAS A MATAR FARRU?, ¿A MI FARRU?” al tiempo que hacia un movimiento con la mano, pero si llegar a sacar ningún arma, pues tampoco la tenía.
En ese momento Trinidad le pasó un revolver a su hijo diciéndole “MATALA”, frase que repitieron las acusadas Josefa y Adoración, sacando Juan y José un revolver cada uno y apuntaron primero a Carmen Ligero, Consuelo Moreno y José Cortés Picazo y luego dispararon contra la puerta de la casa de la Parrala, donde Josefa se había intentado refugiar detrás de la puerta, pero dos de los disparos atravesaron la puerta impactando en la cabeza ocasionándole lesiones mortales de necesidad.
Tras ello los acusados huyeron del lugar siendo todos ellos detenidos más tarde e interviniéndoseles dos revólveres modelo Colt MK III y Astra 357 de 9 mm para munición del calibre 38, así como una maza con púas, una navaja y un katana.
El Fiscal formula pide las siguientes condenas:
1. Por el delito de homicidio 15 años de prisión
2. Por el delio de amenazas 1 año de prisión
3. Por el delito de tenencia de armas 2 años de prisión
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